Por fin, Nadadora ha vuelto. 1997 es el primer adelanto del nuevo disco, que llegará en los próximos meses bajo el sello Ernie Records. 1997 captura la esencia de lo que siempre ha sido Nadadora: una voz propia, inconfundible y honesta en el corazón del indie español.
Tras 15 años de silencio, Nadadora está de vuelta. 1997 es el primer adelanto de su nuevo disco, editado por Ernie Records. Un trabajo en el que Sara Atán (voz y guitarra), Gonzalo Abalo (voz y guitarra), Edu Romero (bajo), Daniel Abalo (batería) y Montxo Couselo (teclados) suenan a reencuentro y a redescubrimiento.
En 1997 reconocemos también la madurez creativa de Nadadora. Estamos ante un single que recupera la esencia del indie pop y el dream pop, con capas shoegaze y una sensibilidad única cantada en español.
1997 construye atmósferas de guitarras reverberadas, teclados absorbentes y voces etéreas, pero con más fuerza y presencia, apoyadas por una base rítmica (bajo y batería) mucho más sólida, en la línea de referentes internacionales como Beach House, Slowdive o Cigarettes After Sex, pero con un sello propio, más Nadadora que nunca.
Este nuevo single suena a reencuentro y a descubrimiento, a cicatrices y a nuevos comienzos capturando la esencia de lo que siempre ha sido Nadadora: una voz propia, inconfundible y honesta, en el corazón del indie español.
«Luz, oscuridad, luz… oscuridad ¡¡y luz!! Nadadora ha vuelto, y lo hace por motivaciones que poco tienen que ver con el oportunismo o la nostalgia. En este último sentido, puede que su primer tema nuevo en 15 años, 1997, despiste. “En la radio vuelven a sonar/ canciones que ya nadie quiere escuchar/ Hablan de ti y de mí/ de las cosas que solíamos sentir/ de fantasmas que ya no salen a bailar”, comienzan cantando justo antes de abrazar el estallido del presente. “Ahora explotaremos en el cielo/ seremos un destello/ brillaremos esta noche de nuevo/ tan solo un momento/ nada más”. Envuelta en una melodía de indie pop luminosa y melancólica al mismo tiempo, la canción recupera al grupo gallego desde su más pura esencia y, al tiempo, nos devuelve esa esencia renovada. Ya no son aquellos jóvenes post adolescentes que comenzaron el grupo en 2002 y que se negaban a ser fugaces. Ahora asumen esa fugacidad, marcados por el paso y las heridas del tiempo, pero con su espíritu intacto: el de aferrarse desesperadamente, a sabiendas de la necesidad de hacerlo, a la música y a las cosas que importan. Pocas veces el regreso de un grupo se enunció en una canción de forma tan clara y emocionante.»
– David Saavedra (Periodista especializado en música y cultura)
1997 se grabó en Estudio Uno. Se presenta con un videoclip desarrollado por María López; la pieza emociona ya que atestigua el reencuentro, y logra transmitir y contagiar la atmósfera de la canción. El diseño de portada es obra de Guillermo Arias. 1997 cuenta además con la producción a cargo de Martí Perarnau (Zahara, León Benavente, Juno) y la ingeniería de sonido de Pablo Pulido (Estudio Uno), dos de las figuras más destacadas del panorama nacional.Con 1997, Nadadora firma un regreso que trasciende la nostalgia: un renacer creativo que reafirma su lugar en la historia del indie español y que anticipa un nuevo capítulo cargado de intensidad, emoción y verdad. Un retorno necesario, luminoso y honesto, que confirma que, a veces, el silencio solo precede a los comienzos más brillantes.